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Ir a comprar zapatos y acertar puede llegar a ser un suplicio. Conseguir un calzado cómodo, que se adapte a tus necesidades diarias y que sea duradero se vuelve una tarea complicada en muchas ocasiones.

Se trata de una decisión muy personal, sobre todo si tienes problemas de espalda, de pies planos, tienes los pies muy estrechos…Por eso, comprar sin prisas y “con cabeza” tiene que ser tu prioridad. Ahí van algunos consejos para que compres el calzado más adecuado para ti.

1. Que el precio no te engañe. Que sean caros no significa que sean de mejor calidad. Algunos modelos básicos son “tan buenos” (incluso mejores) como marcas más caras.
2. Observa tu pisada. Esto te ayudará a saber escoger mejor tu próximo par de zapatos, en función de tus necesidades morfológicas.
3. Escoge la talla adecuada. Escoger la correcta no solo está relacionado con la longitud. También debes valorar la anchura de tu pie y curvatura de tu empeine. Un consejo, ten en cuenta la forma de los dedos de tus pies. Así evitarás sufrir dolores innecesarios, al igual que rozaduras y esas ampollas tan molestas. Ten en cuenta que tu peso también es importante ya que la presión que se ejerce hará que un calzado te convenga más que otro.
4. Compra por la tarde y con el calcetín o media que lleves habitualmente. Si usas plantillas también te recomendamos que te pruebes los zapatos con ellas. Así verás si en, tu día a día, ese modelo te va a resultar cómodo o no. Te recomendamos que escojas esta hora porque los pies están más hinchados que por la mañana.
5. Anda con ellos. Camina unos metros. Llévalos durante un rato para ver si se adecúan bien a la forma de tu pie. Te evitarás sorpresas cuando ya los hayas comprado y te los pongas para salir a la calle.
6. Determina el tipo de calzado que necesitas y cuánto te quieres gastar. Las compras compulsivas acaban haciendo “daño” a tu bolsillo ya que nos solemos guiar por el diseño y las tendencias del momento.
7. Recuerda que las tallas varían en función de cada zapato. Puede que de un modelo una talla te quede bien pero de otro necesites otra talla distinta.
8. Pruébatelos. Si no te parecen cómodos cuando te los pruebas en la tienda, no te lo van a parecer en tu casa. Mira que te encajen bien en el pie para que no te hagan daño en los dedos, ni rozaduras o ampollas.
9. Compra el modelo que sepas que te vas a poner y que se adecúe a tu estilo. Evita comprártelos porque se los hayas visto a alguna celebrity o estén de moda. Puede que no estén hechos para tu día a día.
10. Respecto al material, opta por un calzado resistente. Por ejemplo, los de piel son una muy buena inversión si esa piel es de calidad. No obstante, asegúrate de ello. Además, opta por colores que combinen con la ropa de tu armario. Sino cogerán polvo en tu zapatero y habrá sido una compra innecesaria.